El rápido aumento de los cursos en línea masivos y abiertos (MOOC,
por sus siglas en inglés) ha renovado el interés por las diferentes
opciones de enseñanza y aprendizaje abiertos y en línea. Este
«renacimiento» ha puesto de manifiesto los retos y el potencial
vinculados al diseño de dichos entornos educativos.
Sin duda, la acelerada expansión de la
educación abierta en línea supone riesgos en lo relativo a la calidad
pedagógica y a la experiencia del alumno. Nos encontramos ante una gran
variedad de enfoques en lo que se refiere a la oferta, la pedagogía, las
funcionalidades y los mecanismos de apoyo para el aprendizaje abierto
en línea. Algunos de ellos han tenido éxito pero otros no tanto, por lo
que consideramos primordial articular, compartir y evaluar los
conocimientos para el diseño existentes.
Los patrones de diseño y los lenguajes de patrón
se han presentado como herramientas eficaces para ofrecer un discurso
riguroso que aúne la teoría y la práctica. Christopher Alexander propuso
el modelo de estos patrones como una forma de lenguaje de diseño en el
contexto de la arquitectura. Un patrón de diseño describe un problema
recurrente (o un reto de diseño), las características del contexto en el
que ocurre y un método posible para solucionarlo. Los patrones se
organizan en sistemas coherentes denominados lenguajes de patrón en los
que los patrones se relacionan unos con otros para ofrecer un conjunto
de soluciones de diseño interrelacionadas que se pueden aplicar a
problemas nuevos.
Algunas de las cuestiones clave que
figuran en los artículos de este número están respaldadas por el deseo
de comprender los mecanismos y los procesos de diseño por los que se
llega a crear y ofrecer un aprendizaje abierto en línea en proporción a
la necesidad y, por extensión, a poder plasmar esto en soluciones
compartibles y con posibilidad de ser aplicadas por los demás.
Los artículos del presente número
abordan esta cuestión de diferentes maneras. En primer lugar,
Hatzipanagos ofrece una revisión de la literatura MOOC y se pregunta qué
cursos MOOC pueden contribuir al debate en torno al diseño del aprendizaje;
a continuación, termina ofreciendo un mapa conceptual de las
características de aprendizaje identificadas con una serie de patrones
de diseño MOOC. Salvador y Scupelli destacan la importancia de colaborar
en los procesos de creación de patrones. Describen una metodología de
creación de patrones basada en datos y un repositorio de patrones abierto y de apoyo en el ámbito del diseño de sistemas de aprendizaje en línea. Lackner et al. emplean una perspectiva de análisis del aprendizaje sobre la actividad del participante en los cursos MOOC y proponen tres patrones de diseño para combatir el elevado porcentaje de abandono de los alumnos.
A continuación, Littlejohn y Milligan ofrecen una panorámica de los
MOOC orientados a los alumnos del mundo profesional. Señalan carencias
en torno al aprendizaje autorregulado y, como respuesta, ofrecen una
serie de cinco patrones que fomentan el diseño de cursos MOOC centrados en esta autorregulación.
Después, Mor y Warburton describen los resultados del proyecto de
patrones de diseño (Design Patterns Project) en el que se recurrió a una
metodología de talleres de patrones participativos.
Los autores demuestran la utilidad de este enfoque mediante tres
patrones prácticos para el aprendizaje activo y colaborativo. Koeppe
analiza las ventajas de emplear un MOOC externo en un entorno de aula invertida.
El artículo plasma tres patrones interrelacionados para demostrar cómo
puede alcanzarse este objetivo. En su artículo sobre la interacción
entre iguales, Liyanagunawardena et al. se centran en los foros
de debate y parten de siete narrativas de diseño distintas para
presentar tres patrones con los que facilitar el desarrollo de un debate
significativo cuando el número de participantes es muy elevado. En el
artículo final, Dacko opta por un enfoque de diseño alternativo pero
complementario y se centra en una metodología de diseño concreta para
mostrar cómo puede emplearse el entorno del e-learning (aprendizaje electrónico) inclusivo para crear soluciones cohesionadas y unificadas.
A la luz de los distintos artículos
presentados en este número, está claro que contamos con una amplia
comunidad de investigadores, diseñadores y profesionales trabajando
sobre las cuestiones relativas al diseño surgidas de la continua
expansión de los cursos abiertos en línea. Resulta
apasionante ver cómo los autores aprovechan las bases de la
investigación sobre educación a distancia tradicional y las extrapolan a
nuevos terrenos que priorizan la puesta en común de conocimientos para
el diseño como medio para hacer frente a los desafíos concretos que
surgen con el aprendizaje y la enseñanza a escala.
No hay comentarios:
Publicar un comentario