¿Dónde está el empleo?

Dentro de muchos años, habrá 1.600 extremeños que les podrán contar a sus nietos que firmaron un contrato de trabajo indefinido en febrero de 2010, durante la peor crisis que ha vivido la economía occidental desde el 'crash' de 1929.

La cifra es baja, mínima dirán algunos, pero demuestra que aún queda sitio para la esperanza. Son 1.600 empresarios que ahora mismo están dispuestos a dar trabajo sin fecha de caducidad, al menos en teoría.

Aún se pueden encontrar ofertas de empleo, aunque es cierto que son menos. Pero lo más importante es que son distintas. No por repetida la afirmación deja de ser cierta: la crisis está reajustando las piezas del escenario laboral. El sector de la construcción no será nunca más como hasta ahora, por lo menos en estas condiciones, y hay que buscar nuevas oportunidades. Con independencia de que se reforme el mercado laboral y cómo se haga, es indudable que habrá actividades que tendrán que sustituir al ladrillo puro y duro.

Los expertos lo llaman 'yacimientos de empleo', y el más obvio es todo lo relacionado con las energías renovables. Por sus condiciones climáticas y geográficas, Extremadura es una región privilegiada para albergar muchos tipos de generación alternativa. El 40% de toda la producción solar termoeléctrica que habrá en España estará en la región en el horizonte del año 2012.
Más retrasados marchan los planes en lo referente a la eólica. Ningún proyecto extremeño ha conseguido entrar en el registro de preasignación de renovables, aunque desde la Junta se asegura que lo harán el año que viene.

«Es el principal nicho de mercado que tenemos ahora mismo y una ventaja respecto a otras comunidades autónomas», confirma Cecilio del Cid, máximo responsable en Badajoz y provincia de la empresa de trabajo de temporal Adecco. Ingenieros, conexionistas, panelistas y administrativos son algunos de los puestos que las empresas le están demandando en estos tiempos que corren.

De hecho, este es uno de los ejes del discurso político de Guillermo Fernández Vara en los últimos tiempos. En la región, el modelo de economía sostenible debe pasar por aprovechar las condiciones naturales que posee. Es decir, agua, sol y tierra.

Incidió en ello el miércoles de la semana pasada, en una conferencia que impartió en Madrid, y también el viernes siguiente en Valladolid, en una reunión del Comité de las Regiones de la UE.
Las cifras hablan por sí solas, solamente la energía eólica y la termosolar generarían del orden de 11.000 empleos durante la construcción de las plantas y 2.500 durante su funcionamiento. Y además está la fotovoltaica, la biomasa, la geotérmica...

Es la gran esperanza verde. 1.169 jóvenes extremeños están cursando estudios de renovables en la Formación Profesional. De momento son los primeros, en dos años también se podrá acceder al ciclo de técnico superior, cuyo contenido está siendo redactado en estos momentos.

El Servicio Extremeño de Empleo (Sexpe) no es ajeno a estos movimientos. De hecho, su director gerente, Rafael Pacheco, engloba el empleo verde como uno de los cinco yacimientos de empleo fundamentales que ahora mismo ve en la región. Pero advierte que se trata de una actividad muy especializada, por lo que la formación resulta vital.

Además, añade que hay sectores que están consiguiendo crear empleo en la actual coyuntura, son estos precisamente los que hay que potenciar.

Formación
En esta dirección marchan también las políticas de formación y reciclaje de la Junta de Extremadura. De hecho subvencionará cursos de formación para desempleados sobre estas materias en la gran mayoría de las mancomunidades extremeñas. Ha llegado a esta conclusión después de realizar un estudio revelador. El Observatorio del Empleo de Extremadura ha analizado el mercado de trabajo de todas las mancomunidades extremeñas y las cuatro ciudades principales.

Con los resultados en la mano, ha elaborado un catálogo de actividades formativas que hay que impartir en cada territorio para poder explotar esos yacimientos de empleo.

El más repetido está relacionado con las energías renovables, pero también hay otros relevantes. Con carácter general, esta oferta de especialización pone de manifiesto los empleos que se consideran con más futuro.

Destaca todo lo relacionado con la ley de dependencia, como la atención socio sanitaria a personas en el domicilio o cuidador de discapacitados. También con los servicios vinculados a la construcción, como fontanero, electricista o polimantenedor de edificios y mobiliario urbano.
Dos posibles colocaciones también recurrentes son la de empleado de cocina y guarda privado de seguridad.

Pero también hay posibilidades vinculadas a la geografía concreta de cada comarca extremeña. En las Vegas del Guadiana, altas y bajas, se oferta formación en la industria conservera; y lo mismo sucede con el sector cárnico en zonas como Río Bodión, la Serena y la Sierra de Tentudía. En Olivenza, Tierra de Barros, Jerte o Sierra de Gata hay posibilidades de ser guía, animador o promotor turístico.

Finalmente, trabajar atendiendo al público en portugués en Badajoz, y en inglés en Cáceres puede ser otra posibilidad de trabajo.

Además de las colocaciones relacionadas con las renovables, Adecco destaca que está gestionando contratos relacionados con la agroconserva, la hostelería y la industria auxiliar y comercio de automóviles.

«Creo que esto no se da tanto porque se venden más coches en la región como porque hay países que están saliendo de la crisis y empiezan a reactivar el mercado», cuenta Cecilio del Cid. «En todo, el volumen de colocaciones todavía es demasiado bajo como para poder decir que estemos saliendo de la crisis».

Por su parte, José González Corrales, orientador laboral de la asociación extremeña de universidades populares (Aupex), apuesta por el autoempleo como otra interesante posibilidad. «La balanza entre la oferta y la demanda está obligando a replantearse el autoempleo con tintes innovadores como una opción seria para afrontar estos tiempos». Nuevos medios de transporte, especialización en la construcción, cuidado infantil, atención a dependientes y turismo especializado son otras de las posibilidades que plantea.

Fuente: Hoy