¿El empleo verde será el futuro?

¿El empleo verde, qué es?

Al principio se tiene que constatar que no hay una definición establecida. Pero según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente el concepto de “empleos verdes” se entiende:

“Empleos verdes son los que reducen el impacto ambiental de las empresas y los sectores económicos, hasta alcanzar en definitiva niveles sostenibles. En el informe se entiende por empleos verdes el trabajo en la agricultura, la industria, los servicios y la administración que contribuye a conservar o restablecer la calidad ambiental.” (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (2008), p. 5)

También es importante de decir que hay empleos verdes en muchos sectores de la economía “(…) desde el suministro de energía hasta el reciclado y desde la agricultura hasta la construcción y el transporte.” (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (2008), p. 5).

Concretamente los empleos verdes tienen diferentes funciones con respecto a la protección del medio ambiente:

“Esos empleos ayudan a reducir el consumo de energía, materias primas y agua mediante estrategias de gran eficiencia, a descarbonizar la economía y a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, a disminuir o evitar por completo todas las formas de desechos y de contaminación, y a proteger y restablecer los ecosistemas y la biodiversidad. Los empleos verdes contribuyen en forma decisiva a reducir la huella ambiental de la actividad económica.” (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (2008)).

No obstante, esta definición no puede ser considerado como definitiva – según las Naciones Unidas hay diferentes “tonalidades de verde”. Para ilustrar este hecho se puede aducir este ejemplo:

“Por ejemplo, los trabajadores que fabrican automóviles híbridos o de bajo consumo contribuyen a la reducción de las emisiones resultantes del transporte menos que los que trabajan en el transporte público.” (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (2008)).

Por ello, lo mejor es  empezar a aprender qué es el desarrollo sostenible, sus posibilidades y empezar a adaptar a nuestras empresas a los modelos del futuro mediante la formación.